Amenazas para las aves: colisiones (iluminación nocturna)
Protección de nuestros cielos nocturnos para las aves

El problema de la iluminación nocturna

El cielo nocturno es un componente asombroso de nuestro entorno que es compartido tanto por las personas como por la vida silvestre. El ciclo del día y la noche es importante para los ritmos naturales de todos los seres vivos, especialmente para los miles de millones de aves que dependen de él para sortear eficazmente sus migraciones nocturnas.

El uso de iluminación artificial nocturna, que es luz creada por los seres humanos, ha ido aumentando en todo el mundo y está alterando el cielo nocturno. En noches despejadas, la mayoría de la gente ya no puede salir a la calle y ver un cielo lleno de estrellas. Aunque la iluminación nocturna tiene como objetivo aumentar la visibilidad y puede ser útil por muchas razones, es importante utilizar la luz de una manera que no sea perjudicial para los humanos o la vida silvestre y que no dañe el medio ambiente.

Lamentablemente, la iluminación nocturna a menudo se apunta hacia el cielo o el paisaje, y con ello se proyecta una cantidad excesiva de luz que es innecesaria.

¿Por qué es nocivo para las aves? La iluminación puede atraer a una gran cantidad de aves que migran por la noche desde una distancia de hasta 5 kilómetros. Dichas aves pueden quedar atrapadas en estas áreas de luces brillantes y dar vueltas sin cesar, agotando las reservas de energía necesarias para la migración, e incluso chocar con edificios e infraestructura. Este fenómeno es especialmente frecuente en las noches de nubes bajas o niebla, cuando las aves tienden a migrar a altitudes más bajas donde la luz que se refleja en las nubes puede desorientarlas. Durante las migraciones en noches de niebla se han documentado múltiples episodios de mortalidad masiva, cada uno de los cuales involucraba a cientos de aves.

A lo largo del año, la iluminación nocturna puede afectar a las aves al iluminar su hábitat, lo que puede hacer que las aves eviten hábitats esenciales para su supervivencia y alterar las relaciones entre depredadores y presas, todo debido a que estas áreas tienen demasiada luz.

La buena noticia es que se han ideado medidas sencillas y fáciles que todos podemos tomar durante todo el año para ayudar a mantener oscuros los cielos nocturnos.

Vista nocturna de un edificio en Portland, Oregón, con las luces encendidas (izquierda) y luego con las luces apagadas (derecha). El Programa Lights Out de Portland Audubon cuenta con el apoyo parcial del Programa del Tratado Urbano para Aves del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU. Cortesía de Ali Berman de Portland Audubon. 

¿Qué podemos hacer?

¡Podemos ayudar a resolver este problema con solo presionar un interruptor!

Apagar las luces por la noche o tomar medidas sencillas para limitar la iluminación de modo que sea más beneficioso para las personas hará que nuestro cielo nocturno sea naturalmente más oscuro, lo que contribuirá a crear un entorno más natural para las personas y las aves.

Apague las luces

  • Si no se necesita la iluminación, tome la decisión de apagarla permanentemente o consulte “Sincronización” más abajo.
  • Las aves corren mayores riesgos por la iluminación durante noches nubladas en las migraciones de primavera y otoño. Considere si la iluminación se puede apagar temporalmente de abril a mayo y de agosto a octubre, o como mínimo en las noches nubladas de esos meses.
  • Si las aves quedan atrapadas en un área con luz brillante que no se puede apagar permanentemente, apagar las luces durante 15 a 20 minutos puede permitir a las aves escapar de la luz que las desorienta y volver a su comportamiento normal. Si no está seguro de si las aves están atrapadas o quedarán atrapadas, planifique interrupciones periódicas de la iluminación o instale temporizadores (ver a continuación) para permitir que las aves escapen.

 

Si no puede apagar las luces por completo durante la noche, plantéese la posibilidad de utilizar sistemas de iluminación que tengan en cuenta las aves durante todo el año. Es decir, utilizar la iluminación solo donde y cuando sea necesaria e iluminar únicamente el área prevista. La dirección de la luz, el tiempo que permanece encendida, el color de la luz y restringir la luz a las cantidades mínimas que se requieren por seguridad son factores a tener en cuenta que pueden contribuir a reducir los efectos negativos de la iluminación.

Sincronización

  • Limite la iluminación únicamente a los momentos en que sea necesaria.
  • Utilice controles automáticos como temporizadores, atenuadores o sensores de movimiento para encender y apagar las luces según sea necesario.

Dirección

  • Apague las luces que apuntan hacia el cielo o las luces que iluminan el paisaje circundante.
  • Evite la dispersión de la luz hacia arriba cubriendo, seleccionando o colocando luces donde estas no iluminen por encima del plano horizontal.
  • Mantenga la iluminación lo más cerca posible del suelo, de modo que se iluminen solo las estructuras necesarias.

Evite la fuga de luz desde las ventanas

  • Cierre las persianas o cortinas por la noche.

Color y brillo

  • Utilice luz ámbar, naranja, roja o "más cálida", que es menos dañina para la mayoría de las especies, ya que se reduce la probabilidad de que desencadene una respuesta conductual. Los colores más cálidos tienen longitudes de onda más largas (> 560 nm) y temperaturas de color correlacionadas más bajas (TCC < 3000 grados Kelvin).
  • Evite usar luz azul, blanca o "más fría", que es la menos favorable para las aves, otros animales salvajes y las personas. Los colores más fríos tienen longitudes de onda más cortas y temperaturas de color correlacionadas más altas (> 3000 grados Kelvin).
  • Mantenga la luz lo más tenue posible.

Ventajas de la iluminación que es respetuosa con las aves

Las aves migratorias corren el riesgo de desorientarse y ser atraídas por áreas iluminadas, donde pueden chocar contra edificaciones, lo que lamentablemente termina en tragedia. Prestar especial atención a las luces durante los períodos pico de migración, en primavera y otoño, puede ayudar a las aves a mantener el rumbo, y así aumentar sus posibilidades de supervivencia y procreación exitosa, ¡lo que se traduce en más aves!

Al fomentar estas prácticas a lo largo del año, logrará un impacto inmediato en el medio ambiente que le rodea. No solo cooperará a preservar los ciclos naturales que son tan vitales para las personas, las aves y demás animales salvajes, ¡sino que también ahorrará más dinero gracias a un menor consumo de energía!

Esta pasarela en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Valle de Oro está iluminada de una manera que protege a las aves. Al enfocar la luz sobre la pasarela, no se genera el innecesario derrame de luz hacia el cielo. El área permanece segura y oscura para las aves que migran de noche. 

USFWS

Recursos adicionales de apoyo para que preserve el cielo nocturno